martes, 22 de diciembre de 2015

> Cata de Bodegas Frontaura (DO. Toro) en Tomevinos






En el año 1999 vio la luz un interesante proyecto empresarial en la localidad zamorana de Toro. La fundación de Bodegas del Palacio de Frontaura y Victoria, más conocidas como Bodegas Frontaura, supuso la reanudación de la actividad vitivinícola desarrollada por varias generaciones anteriores de la actual familia propietaria, con la clara voluntad de posicionar sus vinos en la cima de la DO. Toro. El atractivo nombre de la bodega proviene de los apellidos de dos nobles familias castellanas, que tras establecer parentesco entre sí, se convirtieron en propietarias de un valiioso palacio cuya fachada principal da a la plaza donde se erige la Colegiata de Santa María la Mayor, referente indudable del arte románico zamorano.



Pórtico de la Colegiata Santa María la Mayor de Toro. Fuente: www.spain.info


La bodega cuenta con 120 hectáreas de viñedo en propiedad de la variedad Tinta de Toro, situadas aproximadamente a 654 metros de altitud, mayoritariamente cultivadas en espaldera y con riego controlado, aunque existe una pequeña parcela cultivada por el método tradicional en vaso y sin regadío, se trata de unas cepas prefiloxéricas cuyo fruto se destina casi exclusivamente a la elaboración del Aponte Reserva, vino top de la bodega. La climatología es extrema, con elevadas temperaturas y escaso índice pluviométrico en verano y con temperaturas bajo cero en invierno. Dichas condiciones meteorológicas determinan las características de la  variedad Tinta de Toro, hollejo grueso y contenido elevado en azúcares, lo cual se traduce en alta concentración de taninos y alcohol en dichos vinos.


Cristina Robles (Frontaura) durante la presentación

No son los vinos de Toro precisamente fáciles, ni para el consumidor ni para el enólogo. Todo personalidad y carácter, su elaboración supone un reto cada añada. Los controles de maduración, la fecha de vendimia, los periodos de fermentación, la crianza en barrica... Absolutamente todo influye en el resultado final, mucho más en Toro que en otras zonas geográficas. El mismo grupo empresarial posee también Bodegas Nexus, pertenecientes a la DO. Ribera del Duero, y según nos transmitió Cristina Robles, delegada comercial de la bodega, la elaboración de los vinos de Ribera siempre resulta, por la propia naturaleza de cada variedad de uva, menos compleja que la de los vinos de Toro. 

Bodegas Frontaura elabora 300.000 botellas al año, repartidas entre sus cuatro vinos, exclusivamente tintos monovarietales de Tinta de Toro. Todos los vinos de Frontaura disfrutan de crianza en barrica, en periodos variables en función del vino a elaborar. Las barricas empleadas son siempre de roble francés y la vida útil media de cada barrica es de aproximadamente 4 años. Las barricas nuevas se destinan inicialmente a los reservas, pasando posteriormente a emplearse en el envejecimiento del crianza y finalmente a la elaboración del Dominio de Valdelacasa, vino más joven de la bodega. Teniendo en cuenta el coste unitario de cada barrica, se puede deducir que la renovación del parque de barricas es un capítulo más que importante en la economía de la bodega. 


Michael Cooper (Tomevinos) y Cristina Robles (Frontaura)

Frontaura es una bodega moderna que no pierde de vista la tradición. Sus vinos son el resultado de importantes avances tecnológicos, pero conservan la esencia de los vinos de antes. Sirva como ejemplo el clasicismo de sus etiquetas (que incorporan un detalle del dintel de entrada del Palacio de Frontaura y Victoria)  o también la frecuente presencia de sedimentos en las botellas, signo evidente de la ausencia de estabilización por frío tan habitual en muchas otras bodegas. Para garantizar la homogeneidad de sus vinos, se realiza el embotellado de todas las botellas de cada añada a la vez, no se conserva vino en depósitos ni en tinos para ser embotellado más adelante.



Vinos protagonistas de la cata


Comenzamos la cata en Tomevinos probando el Dominio de Valdelacasa 2009. Se trata del vino más joven de Bodegas Frontaura, procedente de viñedo en espaldera con un rendimiento de 4300 kg/Ha. Elaborado en depósito de acero con una evolución posterior en barrica de tercer y cuarto año (heredada del crianza) durante 7 meses. Rojo cereza de capa media y ribete rubí-granate. Ataque algo alcohólico en nariz, que deja paso a una abundancia de fruta roja y balsámicos. Marcada acidez y mineralidad. Agradable paso por boca, menos astringente de lo esperado. Final levemente amargo (cáscara de naranja?). Postgusto largo. Ideal para consumirlo de inmediato, pero aún con posibilidad de guarda. Un roble de 2009 en plena forma. Parece como si el tiempo se hubiera detenido.

El Frontaura Crianza 2006 tal vez sea el vino de mejor relación calidad-precio de la bodega. Al igual que el anterior se elabora en depósito con uva procedente de viñedo en espaldera con un rendimiento de 3500 kg/Ha, permaneciendo en barrica seminueva durante 14 meses. Rojo cereza de capa media con ribete asalmonado. Frutas rojas y negras en nariz. Caramelo. Tostados. Regaliz y eucalipto. Muy redondo y elegante en boca. Ricamente ácido, invita a tomar otra copa. Final largo nada incómodo. Nuestro preferido.


Selfie durante la cata con un bioselecto winelover

Continuamos catando el Frontaura Reserva 2005, elaborado en depósito con uva procedente de viñedo en vaso con un rendimiento de 3000 kg/Ha. Crianza en barrica nueva durante 18 meses. De color rojo picota de capa media-alta con ribete marcadamente teja. Atractiva nariz de frutas negras en compota, café y mentolados. Alcohol presente sin estorbar. Conserva acidez y fruta. Agradable en boca, aunque menos persistente que el Crianza. Menos interesante que el anterior.

Cerramos esta amena cata probando el vino estrella de la bodega. El Aponte Reserva 2006 se elabora con uva procedente de cepas centenarias prefiloxéricas cultivadas en vaso y de muy bajo rendimiento, máximo 1500 kg/Ha. Realiza su primera fermentación en depósito, para pasar a realizar maloláctica en barrica nueva. Posteriormente evoluciona también en barrica nueva durante 18 meses. Rojo picota de capa media-alta con ribete ladrillo. Frutas negras, chocolate y notas licorosas. Guindas al marrasquino (?). Muy redondo en boca. Elegantísimo final. Magnífico vino, muy a nuestro pesar ligeramente fuera de nuestro presupuesto.

Bodegas Frontaura, la referencia en los vinos de Toro.

Tomamos nota...




2 comentarios:

  1. habrá que ahorrar para el Aponte. Magnifico trabajo una vez más Paco.

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  2. Gracias, Julio. Aunque esta vez "no sales en la foto", tu presencia y contribución en las catas son imprescindibles. Saludos!

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