sábado, 30 de diciembre de 2017

> Cata de "vinazos" en Coopervinos





Ultima cata para cerrar este año 2017, en parte también para dar la bienvenida a la nueva denominación Coopervinos, hasta ahora bajo la marca de una franquicia nacional y que recientemente ha comenzado su singladura por cuenta propia. Nuestros mejores deseos para el futuro tras esta importante y acertada decisión empresarial. 

Y como las cosas que lo merecen hay que celebrarlas siempre con buenos vinos, la propuesta para este evento con sabor a año nuevo y a proyectos futuros se fundamentó en cinco tintos de alta gama, cinco auténticos "vinazos" perfectos para las grandes ocasiones.

Vamos allá...


Imagen promocional. Fuente: www.gonzalezbyass.com

SECASTILLA 2013
Bodegas Viñas del Vero. Barbastro (Huesca) DO. Somontano
100% Garnacha. 
10 meses de crianza en barricas de roble francés.
Curiosa expresión la de esta garnacha cultivada en el valle que le da nombre, a bastante altura y muy al norte en relación a otras zonas geográficas. Picota de capa media-alta con ribete granate. Acidez media. Fruta roja y guindas al marrasquino (chocolate, licor). Pimienta y quesería. Astringencia media. Postgusto largo. Algo alcohólico. Premiado recientemente como mejor vino tinto español del año en el International Wine Challenge. Y con buen criterio...

Imagen promocional. Fuente: www.gomezcruzado.com

CERRO LAS CUEVAS 2014
Bodegas Gómez Cruzado. Haro (La Rioja) DOc. Rioja
Tempranillo y Graciano (95-5)
18 meses de crianza en barricas de roble francés.
Rojo picota de capa media-alta con ribete rubí. Algo cerrado aunque no reducido de inicio. Frutas rojas y vainilla. Habla en voz baja pero dice muchas cosas y muy interesantes. Voluminoso y estructurado. Redondo, sedoso, espectacular en boca. Cremoso e integrado. Un rioja moderno y actual. Posiblemente el mejor tinto en fase gustativa que hemos probado a lo largo de este año 2017.


Imagen promocional

LA HORMIGA 2015
Bodegas Antídoto. San Esteban de Gormaz (Soria). DO. Ribera del Duero. 100% Tinta del País. 
18 meses de crianza en barricas de roble francés.
Soria ha sido siempre la gran desconocida. Tradicionalmente a la sombra de Burgos y Valladolid, capitales "históricas" de la DO, es en la actualidad la tierra prometida de los vinos más modernos y diferentes dentro de Ribera del Duero. Rojo cereza de capa alta con ribete cardenalicio. Delicioso en nariz. Caramelo de café con leche, flores azules y frutas rojas. Acidez notable. Menos voluminoso de lo esperado. Final medio de fruta y torrefactos. Un buen vino que sin embargo no llega a enamorar en fase gustativa.


Imagen promocional

APONTE 2008
Bodegas Frontaura. Toro (Zamora). DO. Toro
100% Tinta de Toro. Cepas prefiloxéricas plantadas en vaso con bajos rendimientos por hectárea. 20 meses de crianza en barricas de roble francés.
Rojo picota de capa más que alta con menisco teja. Fruta negra, chocolate, ciruela pasificada e higos secos. Mermelada de naranja amarga. Cebollino y tabaco rubio. Sabroso final de duración media. Empaña visualmente el resultado final en copa la decisión de la bodega de no filtrar. En perfecto estado a pesar de su edad.



TORRE DEL FALASCO AMARONE
Cantina Valpantena. Verona (Italia). DOC. Valpolicella
Corvina Veronese, Corvinone y Rondinella. .
Elaborado siguiendo la técnica tradicional de "appassimento naturale", dejando secar parte de las uvas para incrementar su contenido en azúcar. Crianza posterior en madera ("affinato in legno"). Granate de capa media-baja con ribete ladrillo. Fruta negra, especias, trufa blanca. Cárnico y sanguíneo. Ataque semidulce en boca. Marcadamente ácido y alcohólico. Sabrosísimo y muy diferente. Complejo y difícil de maridar, pero no importa, lo tomaremos solo... 

A todos los que habitualmente seguís nuestras publicaciones, desde Los Vinos Pausados queremos haceros llegar nuestros mejores deseos para este próximo 2018.

¡Feliz Año Nuevo!



jueves, 21 de diciembre de 2017

> Wine Up Tour 2017: Cena maridada en Restaurante Idílico





Fiel a su cita de mediados de Noviembre, recaló en Zaragoza el Wine Up Tour de Joaquín Parra, embajador de numerosas bodegas españolas. No sólo por la amistad que nos une a él, nos atreveremos a afirmar que en materia enológica es un verdadero soplo de aire fresco y de renovación en el panorama de los aficionados al mundo del vino de la capital aragonesa. Año tras año, su presentación no defrauda jamás y nos permite conocer vinos a los que de forma habitual no tendríamos acceso.

En el año 2016 se cambió el formato de cata estricta por el de cena maridada, más relajada que didáctica, así se ha mantenido en la edición de 2017 y suponemos que también en años venideros, a tenor del éxito obtenido. Sin embargo, algunos cambios sí que hemos podido percibir. Echamos en falta entre los vinos seleccionados algún espumoso así como algún jerez, vinos verdaderamente distintos que marcan los puntos de inflexión en una cata por sus grandes diferencias organolépticas con los vinos tranquilos. Tampoco hubiera estado mal incluir algún vino elaborado con variedades de uva poco conocidas, abandonando momentáneamente la zona de confort que nos proporciona la Garnacha, la Tempranillo, la Merlot o la Verdejo. Indudablemente son reflexiones personales que nos hacemos y que por supuesto no tienen por qué coincidir con las del resto de los asistentes. Una última modificación en relación al año pasado fue el cambio de sede. El traslado del evento del Restaurante Aragonia hasta el Restaurante Idílico hizo que el maridaje ganara peso en relación a la cena y en ese transcurrir los vinos fueron más protagonistas que los platos, lo cual no es ni bueno ni malo, es simplemente diferente y tendrá sus defensores y sus detractores.




Comenzamos la noche con un clásico del Idílico. El pulpo a la gallega con cachelos fue el punto de partida, perfectamente acompañado con un blanco al que ya le teníamos ganas desde hace tiempo. El Beronia Verdejo 2016 elaborado por Bodegas Beronia en tierras vallisoletanas y perteneciente a la DO. Rueda se mostró de color amarillo dorado con reflejos verdosos. Cítricos y herbáceos en nariz, menos tropical y más sincero que otros verdejos. Piña y plátano al atemperarse en la copa. Ataque seco en la entrada en boca, con generosa acidez. Sabroso y anisado final, sutilmente amargo. Peculiar elaboración la de este verdejo, realizando dos vendimias en la misma viña y vinificando cada una por su lado con ensamblaje posterior sin crianza, procedimiento que le confiere al vino final algo más de complejidad. 


Otro blanco, esta vez atlántico, fue la segunda etapa de la velada. Armonizado con un langostino en tempura sobre crema de mango, el Martín Codax 2016 monovarietal de Albariño elaborado por Bodegas Martín Codax y perteneciente a la DO. Rías Baixas es ya un habitual del Wine Up Tour. Visualmente de un amarillo pajizo con evidente reflejos verdosos, mostró en nariz un ligero ataque reductivo que se disipó al oxigenarse. Herbáceos, ciruela y membrillo. Marcadamente ácido y salino en boca, señas de identidad de su procedencia, con postgusto largo e interesante. Un vino comodín, nunca falla. Muy correcto el acompañamiento con marisco, no tanto con la crema de mango, quizás demasiado tropical para un vino que no lo es tanto.


Un ligero cambio cromático nos llevó hasta el Conde de Valdemar Rosé 2016. Perteneciente a la DOc. Rioja, se elabora en Bodegas Valdemar siguiendo un ensamblaje clásico de los claretes riojanos: Garnacha y Viura (75-25) vinificadas juntas. Sin crianza. Imagen afrancesada muy del gusto actual, con ese color tenue y pálido que recuerda al oro rosa. Muy floral en nariz, mucho más que frutal, asoma ligeramente algún recuerdo a fresas sin madurar. Sin embargo, resultó perfectamente equilibrado en boca, más ácido que dulce. Elegantísimo. Respondió satisfactoriamente en el difícil acompañamiento de una alcachofa gratinada rellena de marisco, tal vez más por el marisco que por la alcachofa en sí misma.


Entrando en el territorio de los tintos, nos recibió el Idrias Roble 2016, Merlot y Cabernet Sauvignon, coupage habitual en la oscense DO. Somontano con posterior permanencia en barrica durante 3 meses. Rojo picota de capa alta con ribete rubí casi granate y lágrima pigmentada. Nariz de frutas rojas (cereza, mora) sutiles especiados y torrefactos. También plantas aromáticas y algún recuerdo vegetativo. Fondo sanguíneo, casi metálico. Astringencia y acidez medias en boca, algo falto de redondeo (en barrica, en botella o en ambas). La armonización con el ravioli de langosta con crema de marisco tampoco fue la más adecuada. 


Otro tinto aragonés, en este ocasión perteneciente a la DOp. Cariñena, protagonizó el siguiente maridaje. El Corona de Aragón Special Selection 2014 elaborado por Grandes Vinos y Viñedos respondió perfectamente a su emparejamiento con el hojaldre de queso de cabra con frutos rojos. Ensamblaje emergente protagonizado por la Garnacha acompañada de Cariñena (Mazuela) con 5 meses de crianza en roble francés, se presentó en copa de un color rojo picota de capa media con menisco granate. Ataque en nariz con recuerdos fermentativos a quesería, también a caramelo, frutas rojas y negras. Tabaco rubio y tostados. Acidez media en boca y final agradable, un poco más de peso y estructura le hubiera venido bien. Muy correcto.






No puede calificarse de desacertado el maridaje a base de jamón y queso curado propuesto para un tinto de La Mancha, Tempranillo y Merlot con 12 meses de crianza en barrica cúbica de roble. Esa vanguardia tecnológica de Bodegas Verum en Tomelloso (Ciudad Real) las convierten en uno de esos destinos enoturísticos a tener en cuenta en el futuro. ElVerum Coupage 2012es tal vez el pilar maestro de su catálogo. Cumple sobradamente y hay añadas, como ésta del 2012, que resulta verdaderamente espectacular. Rojo cereza de capa media con ribete granate. Fondo de aromas lácteos y frutas negras. Ciruelas e higos sobremadurados. Chocolate y guindas en licor. Excelente en boca, se disfruta de principio a fin. Armonización sencilla, aunque plenamente satisfactoria, con el queso y el jamón.


Ganando en intensidad, el penúltimo vino de la noche fue el Inspiración Valdemar 2012, vino de autor elaborado en la bodega el mismo nombre perteneciente a la DOc. Rioja que ensambla Tempranillo, Graciano y Maturana Tinta (65-25-10) con 12 meses de crianza en roble francés y americano. Color rojo picota de capa más que alta con ribete granate. Esmalte de uñas y barniz a copa parada. Fruta negra pasificada, tostados, nuez moscada y recuerdos licorosos. Ya lo probamos el año pasado y estos doce meses de evolución en botella le han sentado maravillosamente. Redondo e impecable. En su mejor momento. Hizo crecer exponencialmente en intensidad de sabor al crepe de carrilleras, ya de por sí sabroso y especiado.


El magnífico epílogo a esta cena maridada fue la presentación del Altos de la Finca 2014. Elaborado por Bodegas Finca Constancia en tierras toledanas incorpora dos variedades de uva foráneas como son la Petit Verdot y la Syrah (60-40), con posterior crianza durante 18 meses en barrica nueva de roble francés. Color rojo cereza con ribete granate, aún con recorrido. Frutas negras, pimentón y especias en nariz. Recuerdo vegetal y mentolado. Potente, carnoso, intenso. Un poco alcohólico. Más que largo, eterno. Un señor vino en un momento excelente aunque que con seguridad evolucionará aún mejor. Agradable la armonización con el guiso de venado con garbanzos, algo eclipsado por el vino.

En resumen, una velada estupenda que posibilita cada año el reencuentro con amigos.

Hay que mantener las buenas costumbres...

Foto de grupo. Imagen cortesía de Joaquín Parra (Wine Up)

martes, 12 de diciembre de 2017

> El comienzo de una gran amistad...




La preparación de los exámenes correspondientes a los niveles 2 y 3 del WSET (Wine & Spirit education Trust) tuvo el inesperado efecto colateral de poner en contacto a un puñado de enoaficionados zaragozanos, cada uno con su propia motivación a la hora de decidir matricularse en tan exigente ciclo formativo, pero todos ellos con el denominador común de la pasión por el mundo del vino.

En la primera de estas reuniones informales se cataron 9 vinos internacionales procedentes de Francia, Alemania, Argentina, USA, Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia. Acertadamente, se decidió que fueran monovarietales para poder percibir la tipicidad de cada variedad de uva y de cada región. Aunque no era el objetivo inicial, a lo largo de la cata se intentó además deducir las técnicas de vinificación y crianza empleadas en la elaboración de cada vino, información que no siempre figura en el etiquetado.

Detallaremos a continuación las notas de cata de los vinos analizados, así como una breve opinión personal acerca de cada uno de ellos.

DOMAINE SEGUINOT-BORDET 2016
Variedad: Chardonnay
Origen: Chablis (Francia)
Amarillo limón, nariz limpia de intensidad media. Frutas de pepita, cítricos, cenizas y ahumados. Regaliz de palo. Acidez marcada con ligero amargor final. Poco estructurado en boca. Probablemente con gran tipicidad, aunque carecemos de criterios suficientes. Gana complejidad al evolucionar en copa. Inusual Chardonnay muy septentrional al que no estamos acostumbrados. 

WACHENHEIMER KABINETT 2013
Variedad: Riesling
Origen: Pfalz (Alemania)
Amarillo dorado de capa media. Algo reducido de inicio. Miel, dulce de membrillo e hidrocarburos. Inconfundible nariz de Riesling. Sabrosamente ácido. Untuoso, cremoso y amable en su paso por boca. Aguanta bien en copa aunque decae ligeramente tras oxidarse.

COLOME 2016
Variedad: Torrontés
Origen: Salta (Argentina)
Amarillo verdoso de capa baja. Intensidad marcada en nariz. Limpio. Aromas tropicales. Herbáceos e hinojo. Acidez media. Sorprendentemente salino (?) Sutilmente amargo en el final de boca. Algo corto de recorrido. Promete en nariz más de lo que da en boca. Novedoso.

RIBBONWOOD 2014
Variedad: Sauvignon Blanc
Origen: Marlborough (Nueva Zelanda)
Amarillo limón de capa media. Nariz limpia. Intensidad media-alta. Tropicales y vegetales. Acidez muy compensada. Interesante evolución en copa, de menos a más. Cambiante y transformista al oxigenarse. Excelente y muy divertido.

REMOISSENET BOURGOGNE 2014
Variedad: Pinot Noir
Origen: Borgoña (Francia)
Capa baja con ribete teja. Licoroso y floral. Guindas en licor. Acidez notable con apenas una caricia de astringencia. Correcto Borgoña que, sin embargo, no llega a enamorar.

LA LINDA 2016
Variedad: Malbec
Origen: Mendoza (Argentina)
Capa media-alta con ribete rubí. Frutas rojas y mentolados. Estupendo en la entrada en boca. Acidez y taninos compensados. Muy bien diseñado, atractivo desde el primer momento. Pierde expresividad y decae con el paso del tiempo, llegando a defraudar al final.

EAGLEHAWK 2016
Variedad: Shiraz
Origen: Australia
Capa media-alta con ribete granate. Fruta negra, pimentón, embutido. Algo alcohólico. Redondo, equilibrado. Muy bien elaborado. Aguanta perfectamente la oxigenación en copa, manteniendo aromas iniciales y mostrando una evolución interesante. 

CAPUCCINO PINOTAGE 2015
Variedad: Pinotage
Origen: Sudáfrica
Rojo picota de capa muy alta con ribete granate. Chocolate, café, fruta negra en mermelada. Atractivo pero un poco agotador. Denso, casi pesado en boca. Exagerado en todo, no invita a seguir bebiendo. Complicado de armonizar.

BERINGER 2015
Variedad: Zinfandel
Origen: California (USA)
Cereza de capa media con ribete granate. Verdores y encurtidos. Conserva de marisco en vinagre. Final de fruta pasificada. Ligero en paso por boca. Muy extraño. Alejado de nuestros gustos.

Tal y como adelantamos en el título, y haciendo nuestra una de las más célebres frases de la película Casablanca (1942), mucho tendría que cambiar para que este primer encuentro no fuera el comienzo de una gran amistad...

Último plano de la película Casablanca (1942)

NOTA: Imágenes de portada cortesía de Israel Martínez